Que es una preautorizacion de tarjeta

Que es una preautorizacion de tarjeta

Una preautorización de tarjeta es un proceso que permite a los comercios bloquear temporalmente una cantidad de dinero en una tarjeta de crédito o débito para garantizar el pago futuro de un servicio o producto. Este mecanismo es especialmente útil en situaciones donde el monto exacto no se conoce de antemano o cuando se requiere una garantía de pago antes de la finalización del proceso. A continuación, te explicamos con detalle qué implica este sistema, cómo funciona y en qué contextos se utiliza con mayor frecuencia.

¿Qué es una preautorización de tarjeta?

Una preautorización de tarjeta, o *preautORIZACIÓN*, es una acción que bloquea una cantidad de dinero en una tarjeta para garantizar que el cliente tiene fondos suficientes para pagar un servicio o producto que aún no se ha consumido o entregado. A diferencia de un cargo real, esta transacción no se cobra inmediatamente, sino que actúa como una reserva temporal.

Este proceso es común en alquileres de coches, reservas de hoteles, servicios de catering o cualquier situación en la que el proveedor necesite una garantía de pago antes de la finalización del contrato. El monto bloqueado puede variar, dependiendo del servicio y la política del comercio, y se desbloquea una vez que el servicio se ha completado o se ha cancelado la operación.

Dato histórico o curioso:

Las preautorizaciones se popularizaron con el auge del comercio electrónico y los servicios de reservas en línea. En la década de 1990, empresas como Booking.com y Hertz adoptaron este sistema para garantizar que los clientes no abandonaran sus reservas sin pagar. Hoy en día, es una práctica estándar en múltiples sectores.

Párrafo adicional:

Es importante entender que una preautorización no es un cargo real. No afecta el historial de crédito de inmediato, pero sí puede afectar la disponibilidad de fondos. Por ejemplo, si tienes un límite de crédito de $10,000 y se bloquean $3,000 mediante preautorización, tu límite disponible será de $7,000, aunque no hayas realizado un cargo formal.

Cómo funciona el proceso de preautorización

El funcionamiento de una preautorización se basa en una comunicación entre el comercio, el banco emisor de la tarjeta y el sistema de procesamiento de pagos. Cuando un cliente realiza una reserva o contrata un servicio, el comercio envía una solicitud al banco para bloquear una cantidad específica de dinero. El banco, a su vez, reduce temporalmente el límite de crédito o débito del cliente, aunque no se realiza un cobro real.

Este bloqueo puede durar desde 24 horas hasta varios días, dependiendo de la política del comercio y del banco. Una vez que el servicio se ha completado o el cliente ha cancelado la operación, el monto bloqueado se desbloquea automáticamente, y el límite de crédito o débito se restaura. Si el cliente no cancela la operación, el comercio puede convertir la preautorización en un cobro real.

Ampliando la explicación:

El proceso de preautorización es completamente reversible. Si el cliente cancela la operación antes de que el servicio sea entregado, el bloqueo se elimina y no hay cargo. Sin embargo, si el cliente no cumple con las condiciones del contrato, como no mostrar su reserva en un hotel, el comercio puede cobrar el monto bloqueado. Es por eso que es fundamental leer los términos y condiciones de cada servicio.

Párrafo adicional:

Los bancos suelen notificar a los clientes sobre estas preautorizaciones, ya sea mediante notificaciones push en las aplicaciones móviles o por correo electrónico. Si un cliente detecta una preautorización que no recuerda haber realizado, debe contactar inmediatamente a su banco para verificar si se trata de una operación fraudulenta.

Diferencias entre preautorización y cargo real

Es común confundir una preautorización con un cargo real, pero ambas son transacciones muy distintas. Una preautorización es una garantía temporal de pago, mientras que un cargo real es una transacción definitiva que se registra en el historial de pagos del cliente.

Otra diferencia clave es el tiempo de procesamiento. Mientras que un cargo real puede tardar varios días en reflejarse en el estado de cuenta, una preautorización suele aparecer inmediatamente como una reserva o bloqueo en el saldo disponible. Además, una preautorización no afecta el historial de crédito directamente, a diferencia de un cargo formal.

En resumen, una preautorización es una herramienta útil para garantizar pagos futuros sin comprometer el historial crediticio del cliente, mientras que un cargo real implica una transacción definitiva y permanente.

Ejemplos prácticos de preautorizaciones

Las preautorizaciones son utilizadas en una amplia gama de servicios, especialmente aquellos que requieren una garantía de pago. Algunos de los ejemplos más comunes incluyen:

  • Reservas de hoteles: Al reservar una habitación, el hotel puede bloquear el costo total de la estancia para garantizar que el cliente pague al momento del check-in.
  • Alquiler de coches: Las empresas de alquiler bloquean una cantidad por seguridad contra daños o impuestos.
  • Servicios de catering: Se bloquea un depósito para garantizar la asistencia al evento.
  • Eventos o talleres: Se preautoriza una parte del costo para asegurar la plaza del cliente.
  • Servicios médicos: En algunos casos, se bloquea una cantidad para garantizar la asistencia al paciente.

En todos estos casos, la preautorización actúa como una garantía sin comprometer al cliente hasta que el servicio se haya consumido.

Concepto detrás de la preautorización

El concepto detrás de la preautorización se basa en la necesidad de los comercios de minimizar riesgos financieros. Al bloquear temporalmente un monto en la tarjeta, el comercio asegura que el cliente tiene fondos suficientes para completar la transacción, lo que reduce la posibilidad de no cobro o cancelación última.

Este sistema también protege al cliente, ya que no se cobra hasta que el servicio se ha disfrutado o entregado. Además, si el cliente no cumple con los términos del contrato, como no asistir a una reserva de hotel, el comercio puede convertir la preautorización en un cobro real, lo cual evita pérdidas.

En el ámbito financiero, la preautorización también es una herramienta útil para evitar el exceso de gastos. Al ver el monto bloqueado, el cliente tiene una mejor percepción de sus fondos disponibles, lo que ayuda a mantener un control más efectivo sobre su presupuesto.

5 ejemplos de preautorizaciones en el día a día

  • Reserva de hotel: Un cliente bloquea $200 para garantizar una habitación por dos noches.
  • Alquiler de coche: Se bloquea $150 para garantizar el vehículo durante tres días.
  • Servicios de spa: Se preautoriza $100 para una sesión de masaje.
  • Reserva de evento: Se bloquea $50 para asegurar una plaza en un taller.
  • Compra en línea con garantía de devolución: Algunas tiendas bloquean el monto para garantizar la devolución si no se recibe el producto.

Estos ejemplos ilustran cómo la preautorización es una herramienta versátil que permite a los comercios operar con mayor seguridad y confianza.

Preautorización vs. depósito en efectivo

Aunque ambas opciones sirven como garantía de pago, la preautorización y el depósito en efectivo tienen diferencias importantes. Un depósito en efectivo implica un cobro real que se devuelve al cliente una vez que el servicio se ha completado. En cambio, una preautorización no implica un cobro real, solo un bloqueo temporal.

Otra ventaja de la preautorización es que no requiere que el cliente lleve efectivo, lo que la hace más conveniente en transacciones online o en servicios donde el cliente no está presente en el momento del pago. Además, una preautorización es más rápida de procesar, ya que no implica la entrega de efectivo.

En resumen, la preautorización es una alternativa más moderna, segura y cómoda para garantizar pagos futuros, especialmente en el entorno digital.

¿Para qué sirve una preautorización de tarjeta?

La preautorización de tarjeta sirve principalmente para garantizar que un cliente tiene fondos suficientes para pagar un servicio o producto que aún no se ha consumido. Esta herramienta es especialmente útil en sectores como el turismo, el alquiler de vehículos, los eventos y los servicios profesionales, donde existe un riesgo de no asistencia o no cumplimiento por parte del cliente.

Además, la preautorización ayuda a los comercios a gestionar mejor su flujo de caja, ya que pueden planificar con antelación los ingresos esperados. Para el cliente, esta herramienta ofrece mayor transparencia sobre sus fondos disponibles y le permite cancelar con mayor facilidad si cambia de planes.

Un ejemplo práctico es una reserva de hotel: al bloquear el costo de la habitación, el cliente garantiza su estancia, y el hotel asegura su ingreso esperado.

Alternativas a la preautorización

Aunque la preautorización es una de las herramientas más utilizadas para garantizar pagos, existen otras alternativas que pueden ser igual de efectivas, dependiendo del contexto:

  • Depósito en efectivo: Pago real que se devuelve al finalizar el servicio.
  • Cheque de garantía: Documento que se entrega como garantía y se devuelve al cliente.
  • Tarjeta de garantía: Tarjeta específica que se bloquea para garantizar un servicio.
  • Contrato de compromiso: Acuerdo legal que obliga al cliente a pagar el servicio.

Cada una de estas opciones tiene ventajas y desventajas. Por ejemplo, el depósito en efectivo es rápido, pero no es práctico en transacciones online. Por otro lado, la preautorización es muy versátil, pero puede confundir a algunos usuarios si no entienden cómo funciona.

Ventajas de usar preautorizaciones

El uso de preautorizaciones ofrece múltiples ventajas tanto para los comercios como para los clientes. Entre las principales se encuentran:

  • Protección contra no asistencia: Garantiza que el cliente cumple con su compromiso.
  • Gestión de fondos: Permite a los clientes ver el monto bloqueado y planificar mejor su gasto.
  • Mayor seguridad: Reduce el riesgo de fraude por parte del cliente.
  • Transparencia: El cliente sabe cuánto dinero está comprometido sin que se le cobre inmediatamente.
  • Facilita la devolución: Si el cliente no cumple con los términos, el comercio puede cobrar el monto bloqueado.

Estas ventajas hacen que la preautorización sea una herramienta clave en sectores donde la confianza entre el cliente y el proveedor es fundamental.

Significado de la preautorización en el contexto financiero

Desde una perspectiva financiera, la preautorización representa una transacción temporal que no afecta el historial de crédito ni genera intereses, a diferencia de un cargo formal. Su significado radica en su capacidad para actuar como una garantía sin comprometer al cliente de forma definitiva.

En términos técnicos, la preautorización es una transacción hold o block, que mantiene una cantidad específica en la tarjeta del cliente sin realizar un cobro real. Esto permite al comercio planificar mejor su flujo de caja y al cliente tener mayor control sobre sus gastos.

Además, desde el punto de vista del cliente, la preautorización es una forma de mantener la flexibilidad financiera, ya que no se compromete económicamente hasta que el servicio se ha disfrutado o cancelado.

¿De dónde proviene el término preautorización?

El término preautorización proviene de la combinación de las palabras pre (antes) y autorización, y se utilizó por primera vez en el ámbito financiero durante la década de 1980, cuando los sistemas de pago digital comenzaron a expandirse.

En sus inicios, el concepto se aplicaba principalmente a transacciones de alto valor o a servicios que requerían una garantía de pago, como alquileres de coches o reservas de viaje. Con el tiempo, su uso se extendió a otros sectores y se convirtió en una práctica estándar en múltiples industrias.

El uso del término en español es directamente adaptado del inglés preauthorization, que se ha mantenido prácticamente igual en ambos idiomas.

Variantes y sinónimos de preautorización

Aunque el término más común es preautorización, existen varias variantes y sinónimos que se usan en diferentes contextos:

  • Reserva de fondos: Se usa comúnmente en el sector financiero para describir el bloqueo temporal de un monto en una tarjeta.
  • Bloqueo de fondos: Otro término que describe el mismo proceso, enfatizando el aspecto de bloqueo.
  • Autorización previa: Refleja el concepto de que el cliente debe autorizar previamente el pago.
  • Mantenimiento de fondos: Se usa en algunos sistemas bancarios para describir el bloqueo temporal de un monto.

Aunque estos términos pueden variar según el contexto, todos se refieren al mismo proceso: la garantía de pago sin cobro inmediato.

¿Qué implica tener una preautorización en tu tarjeta?

Tener una preautorización en tu tarjeta implica que una cantidad de dinero ha sido bloqueada temporalmente para garantizar un pago futuro. Esto no significa que se te haya cobrado, pero sí afecta la disponibilidad de fondos en tu tarjeta.

Si tienes una preautorización, es importante que revises tu estado de cuenta para identificar el monto bloqueado y el tiempo que permanecerá en ese estado. En algunos casos, los bloques pueden durar días, semanas o incluso meses, dependiendo del servicio contratado.

Es fundamental que entiendas que, aunque no se te cobra inmediatamente, el monto bloqueado no está disponible para otras transacciones hasta que se desbloquee.

Cómo usar la preautorización y ejemplos de uso

Para usar una preautorización, simplemente debes realizar una transacción en un comercio que la acepte. Esto puede ocurrir de forma automática al realizar una reserva online o mediante el pago en un punto de venta físico.

Ejemplo 1:

Al reservar una habitación de hotel en Booking.com, el sistema bloquea el costo total de la estancia. Una vez que llegas al hotel y pagas el servicio, el bloqueo se desbloquea.

Ejemplo 2:

Cuando alquilas un coche con Hertz, el sistema bloquea una cantidad por seguridad. Si no hay daños, el bloqueo se desbloquea al devolver el coche.

Ejemplo 3:

Al contratar un servicio de catering, el proveedor puede bloquear un depósito para garantizar la asistencia del cliente al evento.

En todos estos casos, la preautorización actúa como una garantía sin compromiso definitivo hasta que el servicio se ha disfrutado o cancelado.

Cómo evitar problemas con preautorizaciones

Para evitar problemas con preautorizaciones, es importante seguir estos pasos:

  • Revisa siempre los términos y condiciones antes de realizar una transacción.
  • Consulta tu estado de cuenta para ver los bloques activos.
  • No ignores notificaciones de tu banco o del comercio.
  • Cancela las reservas con anticipación si no puedes asistir.
  • Guarda copias de las confirmaciones de preautorización.
  • Contacta a tu banco si detectas un bloqueo no autorizado.

Al seguir estos consejos, podrás manejar mejor tus preautorizaciones y evitar inconvenientes financieros o administrativos.

¿Qué hacer si una preautorización no se desbloquea?

Si una preautorización no se desbloquea dentro del tiempo acordado, debes tomar las siguientes acciones:

  • Verifica el estado de la preautorización: Accede a tu cuenta bancaria o contacta a tu banco para confirmar el estado del bloqueo.
  • Contacta al comercio: Asegúrate de que el servicio se haya completado o cancelado correctamente.
  • Solicita el desbloqueo manual: En algunos casos, es necesario solicitarlo directamente al comercio.
  • Presenta una queja si es necesario: Si el bloqueo persiste sin motivo válido, puedes presentar una queja ante el banco o la entidad financiera.
  • Guarda evidencia de la transacción: Esto puede ser útil si necesitas resolver el asunto legalmente.

Es importante actuar con prontitud, ya que un bloqueo prolongado puede afectar tu capacidad de realizar otras transacciones.